COTO MAR AMARILLO
Proyecto: Arq. Sara Tamez + Arq. Alberto Tacher.
Colaboradores: Arq. Fernando Basurto.
Año: 2012
Localización: Guadalajara, Jalisco. México.
Terreno: 1,500 m2
Construidos: 2,200 m2
Interiorismo: Beatriz Menendez.
Fotografía: Mito Covarrubias.
Texto: Ana Zúñiga.
Mil quinientos metros cuadrados, seis casas para venta y tres socios. Así comenzó el proyecto de Coto Mar Amarillo, un conjunto residencial ubicado en la colonia Country Club que exigía privacidad para todas las viviendas y la incorporación de la mayor cantidad de amenidades posibles para ser atractivas ante diversos modelos de familia, pues el objetivo principal era lograr ventas redituables.
Para maximizar el uso del terreno, el coto tiene la calle principal al centro, tres casas a la izquierda y tres a la derecha. Además, cuenta con una caseta de vigilancia y estacionamiento de visitas en la parte exterior. Esto resolvió el tema del aprovechamiento, pero nos planteó un nuevo reto: cómo lograr que seis casas contiguas tuvieran privacidad, iluminación y ventilación natural.
Tomando en cuenta que las fachadas principales son oriente-poniente, se decidió abrir los espacios hacia los laterales para explotar el lado norte-sur de las viviendas. Es así que cada casa cuenta con dos patios laterales que ayudan a ventilar e iluminar los espacios de forma natural.
Los patios en planta baja son totalmente abiertos, por lo que la luz entra a todo el espacio central. Por otro lado, en la parte de la planta alta que mira hacia el norte, se añadió una ventana baja en todo lo largo del pasillo iluminando el camino que lleva a las recámaras, pero manteniendo la privacidad.
En el lado sur de la planta alta, las recámaras tienen una amplia ventana que ve al muro ciego del vecino y a las copas de los árboles de la planta baja.
Por último, la recámara principal se abre a un patio interior que la ilumina y ventila de forma natural, además de fungir como desayunador o área de descanso. Sin embargo, su punto más importante es delimitar el espacio preservando la intimidad, pues la recámara al estar al frente del terreno, con la poca distancia entre casas y con su orientación oriente-poniente, obligaría a sus habitantes a mantener las cortinas permanentemente cerradas.
Cada casa está en un lote de 190m2. En planta baja encontramos una cochera para dos autos, así como un mismo espacio entre dos patios para sala, comedor y cocina. Además, todas albergan un estudio, medio baño y bodega.
En planta alta tenemos tres recámaras y finalmente, en la azotea se acondicionó un agradable roof garden.
Coto Mar Amarillo es un proyecto en el que se aprovecha al máximo el espacio y en donde las desventajas se convierten en puntos fuertes.